El ser humano, complejo como es, sorprende tanto por sus brillantes ejercicios racionales como por una necesidad de experiencias carentes de sentido objetivo. La experiencia por excelencia en la vida del ser humano y que más se ha encontrado en boca de todos a la largo de su existencia es el amor, y más en especifico, el amor romántico. Quién no ha sentido esa cosa que envenena con sentimientos, pensamientos y comportamientos que se presentan con mucha intensidad, DEMASIADA intensidad. Atracción, euforia, felicidad desbordante, pensamiento obsesivo, nervios, idealización, angustia; sin duda, estamos ante una de las experiencias más complejas que viven los seres humanos, que hiere o fortalece, según la circunstancia, a una escala desmedida. El coctel químico, psicológico y la implicación de la parte más reptiliana del cerebro convierte al individuo, si pasa por este estado (y sobre todo en su fase inicial), en alguien probablemente bastante ajeno a él si se definiera en algún otro momento puntual de su vida.
En un plano psicológico, y en gran medida afectando a la parte más inconsciente de nuestro cerebro, debemos a las historias de amor de la pantalla la definición personal que hemos dado cada uno de nosotros al amor romántico. Se comprenderá pronto en estas líneas que, la historia de la que tratará este texto no es únicamente una historia de amor, sino SOBRE el amor.
Spike Jonze estuvo enamorado
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Spike Jonze es el seudónimo que se ha dado a si mismo Adam Spiegel (Rockville, 22 de Octubre del 69) para que no se le vinculara a los diferentes proyectos en los que había trabajado a lo largo de su vida dado su, cito textualmente, "descerebrado y hasta cierto punto tortuoso pasado"; pensaba que este le impediría avanzar en un mundo tan crítico como el cinematográfico.
Spiegel es un polifacético icono de la contra-cultura americana. Comenzó su andadura artística en el audiovisual como director de videos musicales. Ha dirigido una buena cantidad de ellos para artistas de la talla de 'Beastie boys' (siendo el más reconocido 'Sabotage'), 'Bjork', 'Weezer', 'R.E.M.', 'Daft Punk', 'The Chemicals Brothers' o 'Beck', entro otros. Aunque es justo decir que su salto a la fama fue mucho antes, co-fundando la televisiva 'Jackass', cocreando la revista DirT y Big Brother (ambas dedicadas al BMX, al skate, y al mundo urbano) y editando 'Grand Royal Magazine' (revista de referencia en la América urbana). Además de todo esto fue grafitero y fotógrafo contra-cultural (escondido bajo el seudónimo Koufey), dibujante y, posteriormente, actor, productor, y un reconocido guionista y director.
En su carrera en la dirección, encontramos tan solo 4 largometrajes, todos ellos muy reconocidos. Su primera incursión en la gran pantalla fue con la premiada 'Como ser John Malkovich' (1999), una película que le ofreció realizar el mismísimo Francis Ford Coppola. Posteriormente la laureada 'El ladrón de orquídeas' (2002), ambas con el guión de Charlie Kaufman, entre los que existe una latente simbiosis en su forma de hacer cine. Un tiempo después, basada en la historia de Maurice Sendak, adaptó a la pantalla la historia de 'Donde viven los monstruos' (2009), mezclando animatrónica, maquillaje, disfraces y CGI para la representación de sus personajes. Para finalizar, la última incursión en el cine del director fue en el año 2013, con la película 'Her', una radiografía del amor en un mundo donde las Inteligencias Artificiales ya forman parte del día a día; una película visionaria que le valió para ganar un Oscar al mejor Guion original.
Más prolífica fue su carrera en el cortometraje, donde destaca su corto 'I'm Here' (2010), la historia de amor de dos robots en un mundo de humanos. Su último trabajo conocido fue, precisamente, en este ámbito; a caballo entre la publicidad, el arte y ensayo y lo cinematográfico, se encuentra 'Welcome home' (2018), un corto/anuncio para el nuevo Homepod de Apple en el que pone a bailar a FKA Twigs.
En esta última etapa es posible ver la parte mas madura de Spike, una persona lucida y enamorada de la plástica, centrada en mostrar emociones humanas como la soledad, el amor, la amistad, la intimidad y a las relaciones entre diferentes, todo aderezado con algunos puntos de transgresión y humor negro marca de la casa, que todavía colean de su obra de juventud.
En su vida personal, un suceso relevante a destacar y del que sus obras se han tintado es su fallido matrimonio con Sofia Coppola, la directora, guionista, productora y actriz, hija de Francis Ford Coppola y que conoció por su circulo de amistades durante el estreno de 'Malcolm X' en el año 92. Empezaron a salir en el año 1993, formalizaron su matrimonio tras un largo noviazgo en el año 1999 (boda orquestada por el mismísimo Francis Ford Coppola) y se divorciaron en 2003 por "diferencias irreconciliables"; por lo que se sabe, fue una potente historia de amor que se inicio en la juventud y que no sobrevivió por la falta de experiencia vital de ambos.
Más adelante, se retomará esta historia de amor, porque detrás de su última película, 'Her', Spike Jonze nos cuenta la historia de alguien que aprende a amar y guarda una estrecha relación con su misma historia. Se desconocen de primera mano los detalles de esta ruptura a nivel personal, pero conforme avance el texto, se comprenderá que 'Her' es una película que utiliza como vehículo al genero de la ciencia-ficción para mandarse un mensaje a su pasado, y sobre todo, a Sofia Coppola. 'Her' es una película que, si se conoce la historia que hay detrás gracias a ciertos contextos, se puede interpretar como la venganza perfecta a un amor que le hizo daño, o la disculpa más honesta hacia un amor que se rompió, en parte, por su culpa. Puede que sean estas dos cosas a la vez.
Theodore Twombly (Joaquin Phoenix) es escritor de cartas románticas a mano para una empresa online, una profesión que tiene mucha demanda y que otorga, al cliente que contrate el servicio, la posibilidad de poder tener unas bonitas palabras para su pareja, sin necesidad de pensar demasiado en sus sentimientos. La más avanzada tecnología de la información y el servicio forma parte de la vida diaria de la gente de Los Angeles, lugar donde encontramos a un melancólico Theodore que, tras la ruptura con su mujer, no es capaz de encontrar significados para su devenir amoroso ni para las relaciones profundas. Intentando llenar el vacío que tiene en su vida y tras ver un convincente anuncio, Theodore adquiere un sistema operativo con inteligencia artificial que se adapta al usuario no solo informándole, sino ayudándole a nivel personal. La relación entre Theodore y la inteligencia artificial adaptada para él, Samantha, se hace cada vez mas estrecha, poniendo a prueba la lógica del amor, con sus prejuicios y sus desconciertos.
Theodore Twombly (Joaquin Phoenix) es escritor de cartas románticas a mano para una empresa online, una profesión que tiene mucha demanda y que otorga, al cliente que contrate el servicio, la posibilidad de poder tener unas bonitas palabras para su pareja, sin necesidad de pensar demasiado en sus sentimientos. La más avanzada tecnología de la información y el servicio forma parte de la vida diaria de la gente de Los Angeles, lugar donde encontramos a un melancólico Theodore que, tras la ruptura con su mujer, no es capaz de encontrar significados para su devenir amoroso ni para las relaciones profundas. Intentando llenar el vacío que tiene en su vida y tras ver un convincente anuncio, Theodore adquiere un sistema operativo con inteligencia artificial que se adapta al usuario no solo informándole, sino ayudándole a nivel personal. La relación entre Theodore y la inteligencia artificial adaptada para él, Samantha, se hace cada vez mas estrecha, poniendo a prueba la lógica del amor, con sus prejuicios y sus desconciertos.
La historia de un amor verdadero... pero no real
Joaquin Phoenix, actor principal del film y camaleónico como siempre, se nos muestra en una postura tierna y más frágil que de costumbre; por momentos, está tan alejado de si mismo que cuesta ver en él al Joaquin que todos conocemos.
Scarlett Johansson pone su voz a Samantha (la IA del sistema operativo de Theodore). Se comenta que en las fases iniciales del proyecto, era Samantha Morton (popular actriz inglesa) la que ponía voz a esta IA y la que bautizó con su nombre al sistema operativo, pero fue reemplazada en la post-producción por Scarlett; el motivo que argumentó Jonze fue que no encontraba la simbiosis que buscaba con el papel que desempeñaba Joaquin, ya que necesitaba una voz muy personal, sensual y que transmitiera todo lo que haría un actor físico debido a que únicamente su labor interpretativa era vocal.
En los papeles secundarios se encuentra Rooney Mara, interpretando a Catherine, la ex-mujer de Theodore; Rooney hace aquí, probablemente, el papel que desprende más humanidad de toda su carrera, a pesar de aparecer poco en pantalla. Es notable la innegable química que existe entre los dos actores.
Completando el poker interpretativo de un cast de estrellas que pocos años después serian baluartes del cine de Hollywood, aparece Amy Adams interpretando a Amy, la mejor amiga de Theodore, que también respira una humanidad y autenticidad soberbia, siendo probablemente el personaje mas lúcido de la película, y que sirve de pilar tanto a Theodore como al espectador por su mirada cuerda de los acontecimientos; cuando estos pueden parecer aparentemente catastrofistas, lanza el salvavidas para que nadie se ahogue. Papeles menos destacados son el de Olivia Wilde, una desconocida que conoce en una app de citas y que, pese a salir bastante poco en el metraje, luce bastante creíble en su papel de persona con prisa en el amor. Actores de la talla de Chris Pratt también tienen un papel en el metraje, incluso en el perfil más bajo y discreto, se puede escuchar a Brian Cox (conocidísimo por el papel de padre implacable en Succesion) en una llamada de teléfono. Todos, a día de hoy, con carreras lanzadas y aun en auge.
El genial vestuario también se ha sometido a estos lenguajes de color. Un dato curioso es que Spike cuenta que, teniendo en cuenta lo cíclico de las modas, 'Her' se viste muy colorida con ropas informales inspirada en los años 20, que es la única moda de época que no había vuelto aun entonces, con esos característicos pantalones muy subidos y ropas mas anchas. Como curiosidad, en este futuro de 'Her' nadie usa cinturón.
El montaje de Spike Jonze es una licencia diferente a lo que se ve en el cine mas comercial; es muy atractivo visualmente, muy al cine independiente de Hollywood como el que ofreció el mejor Michel Gondry de Olvídate de mi, sin caer excesivamente en la pedantería pretenciosa de una película romántica al uso. Jonze recoge el recurso de su amigo Gondry de evocar los recuerdos con planos sin sonido, entremezclados con lo que sucede en el tiempo real del metraje. Los planos a Joaquin Phoenix cuando usa la sala de chat para solteros o habla con Samantha (por norma general cortos para destacar y ver su expresión) ganan mucha fuerza al nunca haber un contraplano, porque su partenaire no tiene cuerpo (solo se oye), lo que hace que su papel tenga un peso extra y actúe por los dos. Siempre que una pareja se encuentra en pantalla hablando con el protagonista, ambos bandos se encuentran muy separados en el plano/contraplano para agudizar la sensación de soledad y lejanía del protagonista, dejando a la pareja con la que comparte escena siempre junta en el mismo plano salvo cuando la pareja tiene un problema, momento en el que Theodore siempre aparece en medio de los dos. El film gusta de sacar a su protagonista siempre entre multitudes caminando y estando solo en espacios abiertos, haciendo que apreciemos al protagonista ahogado entre la multitud, como parte de un todo en el que juega como una pieza insignificante, con problemas insignificantes. Rara es la vez en la que aparece una pareja junta en un estado feliz. Mucho de esto se le debe a los recursos de Hoyte Van Hoytema, que cumple las funciones de director de fotografía (desde esta película, director de cabecera de Christopher Nolan) que hace un trabajo soberbio y MUY reconocible a su estilo. El mismo recurso de introducir planos descontextualizados basados en flashbacks en medio del presente de la película a modo de una suerte de recuerdo que golpea es algo que podemos ver repetido en películas como 'Interstelar' o 'Tenet'.
El sonido juega un papel clave, ya que actúa como fotografías para la gente sin cuerpo (así lo describe Samantha). La banda sonora corre a cargo de Arcade Fire, que con la ayuda de Owen Pallet, han conseguido crear un universo sonoro perfecto para la película, dando composiciones muy indies. La canción original, que corre a cargo de Karen O, evoca un espíritu minimalista y profundo; además, está genialmente situado en uno de los momentos mas tiernos de la película, quizá el momento más cercano al descubrir del amor.
Y esto nos hace sacar a coalición algo para empezar a comprender todo este entramado, todo bajo la pregunta más básica que nos podríamos formular y que, probablemente y según el momento, todos puedan dar una respuesta tan ambigua como certera: ¿Qué es el amor? ¿y porque existe?.
El montaje de Spike Jonze es una licencia diferente a lo que se ve en el cine mas comercial; es muy atractivo visualmente, muy al cine independiente de Hollywood como el que ofreció el mejor Michel Gondry de Olvídate de mi, sin caer excesivamente en la pedantería pretenciosa de una película romántica al uso. Jonze recoge el recurso de su amigo Gondry de evocar los recuerdos con planos sin sonido, entremezclados con lo que sucede en el tiempo real del metraje. Los planos a Joaquin Phoenix cuando usa la sala de chat para solteros o habla con Samantha (por norma general cortos para destacar y ver su expresión) ganan mucha fuerza al nunca haber un contraplano, porque su partenaire no tiene cuerpo (solo se oye), lo que hace que su papel tenga un peso extra y actúe por los dos. Siempre que una pareja se encuentra en pantalla hablando con el protagonista, ambos bandos se encuentran muy separados en el plano/contraplano para agudizar la sensación de soledad y lejanía del protagonista, dejando a la pareja con la que comparte escena siempre junta en el mismo plano salvo cuando la pareja tiene un problema, momento en el que Theodore siempre aparece en medio de los dos. El film gusta de sacar a su protagonista siempre entre multitudes caminando y estando solo en espacios abiertos, haciendo que apreciemos al protagonista ahogado entre la multitud, como parte de un todo en el que juega como una pieza insignificante, con problemas insignificantes. Rara es la vez en la que aparece una pareja junta en un estado feliz. Mucho de esto se le debe a los recursos de Hoyte Van Hoytema, que cumple las funciones de director de fotografía (desde esta película, director de cabecera de Christopher Nolan) que hace un trabajo soberbio y MUY reconocible a su estilo. El mismo recurso de introducir planos descontextualizados basados en flashbacks en medio del presente de la película a modo de una suerte de recuerdo que golpea es algo que podemos ver repetido en películas como 'Interstelar' o 'Tenet'.
El sonido juega un papel clave, ya que actúa como fotografías para la gente sin cuerpo (así lo describe Samantha). La banda sonora corre a cargo de Arcade Fire, que con la ayuda de Owen Pallet, han conseguido crear un universo sonoro perfecto para la película, dando composiciones muy indies. La canción original, que corre a cargo de Karen O, evoca un espíritu minimalista y profundo; además, está genialmente situado en uno de los momentos mas tiernos de la película, quizá el momento más cercano al descubrir del amor.
Y esto nos hace sacar a coalición algo para empezar a comprender todo este entramado, todo bajo la pregunta más básica que nos podríamos formular y que, probablemente y según el momento, todos puedan dar una respuesta tan ambigua como certera: ¿Qué es el amor? ¿y porque existe?.
Radiografía del amor
Según la Real Academia de la lengua española, el amor es un "sentimiento intenso del ser humano que, partiendo de su propia insuficiencia, necesita y busca el encuentro y unión con otro ser". La acepción es dura y podría definirse como bastante desromantizada, y si bien es una definición puramente empírica biológicamente y no carente de sentido, es fácilmente desmontable; y es que, si tomamos la definición al pie de la letra, llegamos a entender que el amor entre seres humanos se da cuando, precisamente, se presenta la falta del amor, en este caso, del amor propio. También se da por hecho que el amor es un sentimiento exclusivo del ser humano. La discusión se puede prolongar por el matiz de no saber diferenciar la filosofía que hay tras el amor y la biología que hay tras el amor.
Si nos paramos a pensar en la utilidad real del amor desde un punto de vista que pueda llegar a entenderse incluso en los primeros pasos de la existencia del ser humano, podríamos llegar a dilucidar que se trata de un proceso relacionado con la perpetuación de la especie, pero es una mirada bastante simplista y que por definición, desde hace un largo periodo de tiempo no tendría ningún sentido que siga siendo así; el ser humano estaría experimentando, por ende, algún tipo de vestigio. Pero ¿Podría demostrarse que el amor tiene una utilidad real biológicamente que vaya más allá del proceso reproductivo? Para entrar más en detalle, comenzaremos tratando la filosofía de las primeras personas que sentaron su catedra sobre el amor: Los griegos.
1. El amor según la filosofía
Datando de la Antigua Grecia, ya se encuentran textos donde los librepensadores distinguían entre, por lo menos, 11 tipos de amor, que recibían sus propios nombres en función de su principal característica, enumerando entonces:
- Ágape: Es el amor más asociado a la teología y se refiere a un amor desinteresado y benevolente, el que ocurre en el amor divino o espiritual. Este tipo de amor implica el deseo de buscar el bienestar y la felicidad de los demás sin esperar nada a cambio. Es el tipo de amor que el dios de una religión tiene a sus fieles o viceversa.
- Erga: Este término se ha utilizado para describir lo que se podría llamar amor por la comunidad o por un colectivo. Se asociaba, sobre todo, a movimientos de índole religioso o espiritual, pero es fácilmente asociable a día de hoy a cualquier empleo en general, y habla del amor altruista que ofrece el que se esfuerza por ayudar a sus compañeros, se preocupa por el bienestar de todos y demuestra pasión con sus responsabilidades con el objetivo de ayudar a los demás.
- Erga: Este término se ha utilizado para describir lo que se podría llamar amor por la comunidad o por un colectivo. Se asociaba, sobre todo, a movimientos de índole religioso o espiritual, pero es fácilmente asociable a día de hoy a cualquier empleo en general, y habla del amor altruista que ofrece el que se esfuerza por ayudar a sus compañeros, se preocupa por el bienestar de todos y demuestra pasión con sus responsabilidades con el objetivo de ayudar a los demás.
- Philía: Se traduce a nuestros días como amor fraterno, o sencillamente amistad. Es un tipo de amor que implica una profunda afinidad, afecto y apego; es el que se desarrolla en relaciones basadas en la camaradería, la confianza mutua y la reciprocidad.
- Storge: Comúnmente conocido como amor familiar o afecto. Este tipo de amor se refiere a los lazos afectivos que se desarrollan en las relaciones familiares, ya sea entre padres e hijos, hermanos u otros miembros de la familia. Es visto como un amor natural y biológicamente puro arraigado a los lazos familiares.
- Xenia: Se refiere a la hospitalidad, la cortesía y la amabilidad hacia los huéspedes o extranjeros. Para la Grecia clásica, la Xenia era una práctica social y moral muy arraigada culturalmente. En las epopeyas de Homero, es un tema recurrente (por ejemplo en "La Ilíada" y "La Odisea").
- Eros: Define el amor romántico que todos conocemos. Este tipo de amor está asociado con la atracción romántica e idílica entre amantes. En la mitología griega, Eros también es el nombre del dios del amor y el deseo.
- Epithumia: Al contrario que Eros, este tipo de amor define el sentir deseo centrado en lo puramente carnal. Es el más asociado al sexo.
- Pragma: El amor pragmático y duradero que se desarrolla con el tiempo en las relaciones comprometidas; es el amor en el matrimonio. Implica un amor paciente, tolerante y comprometido.
- Ludus: Es el amor lúdico o el coqueto, a menudo asociado con el juego y la diversión. Es el amor ligero y tonto, sin más pretensión.
- Philautía: Habla del amor propio. Es saludable e incluso indispensable cuando implica el cuidado propio, pero también puede manifestarse de manera menos saludable si se inclina hacia el narcisismo.
- Manía: Un tipo de amor que se caracteriza por una intensidad emocional extrema y obsesiva hacia alguien. En términos actuales, está asociado con el amor tóxico.
Con esto, encontramos las bases fundamentales de lo que la filosofía entiende por el amor y lo que a nivel social es su fundamento hasta nuestros días. Muchos filósofos, desde entonces, han presentado sus ideas reflexionando sobre sus bondades y maldades, pero no se ha cuestionado su existencia real.
Por definición, deducimos que el amor según la filosofía cumple una función de evolución social al fomentar la formación de fuertes vínculos entre individuos, ya sea tanto reproductivo como formalmente social, ayudando a la supervivencia de los propios vástagos como a la especie en general. Pero hay otros fundamentos que pueden pasar desapercibidos, como la de que el amor contribuye al bienestar emocional y mental no solo de quien lo recibe, sino también de quien lo ofrece, como ejemplificaría el Ágape, el Erga o el Xenia, los tipos de amores más altruistas para los griegos. De igual modo, el amor ofrecido a amigos, familiares, hijos, animales, deidades o de calado espiritual desarrollan al ser humano a nivel cognitivo, ofreciendo seguridad emocional y autoestima, y disipando, a priori, estados mentales poco favorables.
A nivel filosófico, podríamos indicar que la definición que ofrece la Real Academia de nuestra lengua es, cuanto menos, desafortunada, pero no carece de sentido del todo como se comprueba a continuación.
2. El amor según la biología
Históricamente, la ciencia, mostrando lo que parecía una faceta conservadora, dio a entender que el amor romántico es la versión humana del proceso que dictamina biológicamente la posibilidad de descendencia, y es que en el mundo animal, siempre se ha supuesto que experimentar amor está biológicamente arraigado al sexo y a la selección del mejor de la especie para asegurar una descendencia sana y así se produzca el proceso de selección natural.
Si se hecha un vistazo rápido a los cánones de la belleza global a lo largo de la historia de la especie, uno puede caer en la cuenta de que son muy fluctuantes, y ni mucho menos han sido excesivamente favorables para determinar la supervivencia de nada, especialmente desde el punto de vista científico, y no hablemos de la posibilidad de no reproducción sexual entre personas de mismo sexo y que sin embargo experimentaban, por definición, este amor romántico. También habría que tener en cuenta que el amor que sentimos cada uno, objetivamente, no está regido por cánones; según el individuo, alguien podría enamorarse de alguna persona que a otra no le enamorará. Es por esto que, el amor entre seres humanos ha sido y sigue siendo de los mayores misterios del comportamiento humano.
Por duro que parezca, la teoría más fuerte que encuentra la ciencia sobre el sentido del amor romántico en seres humanos es el de la reproducción entre individuos, contra todo pronostico incluso para ellos. Aun así, la ciencia lucha constantemente por encontrar un porqué a algo que implica procesos tan complejos sin que pase únicamente por la idea de obtener descendencia, ya que la razón hace pensar en esta experiencia como un enriquecimiento más general.
Todo este proceso desarrolla su función raíz, como no podría ser de otra manera, en el cerebro. El enamoramiento es, de hecho, un proceso neurológico que se produce en él y que implica al hipotálamo, el cortex prefrontal, la amígdala, el núcleo accumbens y el área tegmental ventral. Podemos decir que el amor es producido por una causa psicológica y otra bioquímica:
- Causa psicológica:
La psicología nos invita a pensar que ciertos patrones durante nuestra vida (sobre todo en la infancia) nos han dado un pretexto sobre lo que entendemos por un amor ideal y de quien es óptimo enamorarnos. Y cada uno tiene el suyo propio.
El cine, la literatura, la televisión, o la experiencia propia y/o ajena o el trauma, han forjado un tipo de individuo que guste o que complete a cada persona en particular, desde lo físico hasta lo emocional, y esto es lo que dictamina que nos enamoremos de ciertas personas y no de todas. Teniendo presente que el ser humano, social como es, busca la plenitud en comunidad, es natural que su selección se base en lo que cada individuo crea que es correcto para el mundo y para si mismo en un entorno ordenado y controlado para su mente. A efectos prácticos, la definición que leíamos de la Real Academia hace referencia exactamente a esto.
Cuestionable es el hecho de que, si se diera la circunstancia en la que la exposición al amor romantico a nivel cultural fuera nulo o más reducido en el individuo (es decir, que el ser no tuviera patrones de lo que es el amor romántico como aparece en las películas), quizá se podría entender el amor romántico de otra manera y no tal y como lo conocemos en nuestros días, pero el complicado proceso bioquímico del cuerpo ante esta circunstancia, hace pensar que, sea como fuere, siempre se tiene que dar de una forma u otra; queramos o no, estamos evocados a amar.
- Causa bioquímica:
Durante la fase de atracción inicial, viene apareciendo la segregación de dopamina, un neurotransmisor que desencadena sensaciones de placer y recompensa, ya se esté dando lo que podríamos definir como "amor a primera vista" o un amor más dilatado y profundo. Si se prospera, poco a poco, los enamorados experimentan aumentos de los niveles de dopamina, contribuyendo a la sensación de euforia y felicidad por estar enamorado. Esta respuesta química es similar a la experimentada en situaciones de recompensa (recibir un premio, aprobar un examen, comer algo que gusta mucho). La sensación general cuando se experimenta el aumento desorbitado de dopamina sería la de emoción y bienestar asociada con estar cerca de la persona de interés. Es, además, una de las responsables de la adicción; como dato, esta liberación de dopamina junto con las hormonas que se comentan en los siguientes párrafos, ofrecen la misma sensación que producen ciertas drogas duras, de ahí que se hable del amor como una droga.
A medida que se progresa y se establecen vínculos más profundos, la liberación de oxitocina y vasopresina se hace presente; estas son dos hormonas relacionadas con el afecto, que se liberan en el cerebro en grandes dosis durante actividades asociadas con la relación sexual. Son las responsables de que, pensadas en frio, actividades que podrían ser dolorosas y/o poco apropiadas, de repente adquieran una dimensión placentera; se nubla el juicio y la razón. Su liberación torrencial durante el orgasmo es la responsable de la sensación de éxtasis y además, el compartir ese placer fomenta la fidelidad entre individuos. Las alteraciones de los niveles normales de oxitocina se dan en trastornos mentales como la ansiedad o la agresividad social, es por ello que se experimente cierta mejora en el estado de ánimo después de tener un orgasmo o mantener una relación sexual. Como aportación, es que la oxitocina se suele liberar también durante el parto o la lactancia, actuando de la misma forma que se comentaba anteriormente, vinculando la madre con su hijo a un nivel emocional muy grande.
Durante el proceso del enamoramiento, y para complicar el coctel de sensaciones, aparecen niveles elevados de noradrenalina, otro neurotransmisor que, como la dopamina, contribuye a la aceleración del ritmo cardíaco y, sobre todo, la atención intensificada, en particular hacia la persona amada. Este neurotransmisor está asociado con el conocido sistema de "reacción de lucha o huida", una respuesta del cerebro primitivo a situaciones que requieran, precisamente, luchar o huir como solución a un conflicto. Si conoces de la situación o has experimentado rabia por ver a tu persona amada hablando con otra persona (los conocidos "celos"), este neurotransmisor es el responsable junto con la vasopresina de la sensación que produce. Biológicamente, hace que el individuo se encuentre en un estado de alerta constante para vigilar y conseguir tener para sí a la persona amada y que su relación sea única e irrepetible.
También aparece la endorfina, conocida como la hormona de la felicidad. Su liberación causa estados de alegría, inhibe el dolor físico y el dolor emocional, y ayuda indirectamente a que se produzcan todas las demás hormonas que el cuerpo necesita para funcionar. Es una hormona que cuando se da en el cuerpo en grandes cantidades, se convierte en peligrosa, ya que causa un estado tan feliz y nubla tanto nuestra realidad que, cuando se pasa su efecto, se busca obsesivamente volver a estar feliz por todos los medios. Si experimentas adicción al gimnasio, eres una persona 'enamoradiza', fumadora, bebedora, o buscas cumplir objetivos en alguna tarea de forma obsesiva, es probable que hayas experimentado un nivel de endorfina muy alto durante la práctica de esas actividades y busques repetir volver a tenerlo. Junto con la oxitocina y la vasopresina, su aparición descontrolada y su vuelta a un estado normal es la responsable del "síndrome de abstinencia"; es por esta hormona que constantemente se busca a la persona amada de forma obsesiva.
Otra aparición es la de la también conocida como la "otra hormona de la felicidad", la serotonina. Esta no es una hormona como tal, sino un neurotransmisor encargado del estado emocional controlado, de la saciedad general tanto en lo físico y emocional (estar satisfecho comiendo cierta cantidad de alimento, de tener sexo...) y regula indirectamente los ciclos del sueño. La ciencia no da con el motivo exacto por el que empieza a subir los niveles de este neurotransmisor durante el proceso del amor, ya que es un neurotransmisor que su finalidad es mantenerte en un estado de correcto autocontrol al individuo, contrario aparentemente a todos los demás. Se especula que su función es enfrentar de alguna manera el descontrol químico del cuerpo. Algunos estudiosos de la materia sostienen en que es, probablemente, el motivo real por el que el amor existe en la sociedad. Se expresa con esto la idea de que, en realidad, no importa saber porque se produce de forma exacta a día de hoy el amor, lo único que sabemos es que amar correctamente, te convierte automáticamente en una persona más sana, por lo que biológicamente estamos programados para amar y cuidar a todo cuanto se pueda; automáticamente, la recompensa será tener más salud y sentir más felicidad sin perder la cordura.
3. El amor según su fase
El amor, a menudo, se conceptualiza como un proceso que puede experimentar diferentes fases a lo largo del tiempo. Estas fases pueden variar según las teorías psicológicas o incluso las experiencias individuales. Teniendo presente esto, podríamos distinguir unas 3 o 4 fases que englobarían todo el proceso atendiendo a la química que se produce en el cerebro y su respuesta psicológica:
1.- El enamoramiento: dura aproximadamente 1 año y es donde más oxitocina (la hormona asociada a lo sexual) segrega el cuerpo; la sensación de intensidad y las situaciones alocadas son las que reinan en este primer estadio.
2.- Amor romántico: pasada la primera etapa, queda activa la parte del celebro reptiliana (mal llamada así por ser la encargada, de alguna manera, del instinto de supervivencia). El ser humano hace de su amor una necesidad y algo a lo que idealizar. Buscando las sensaciones del primer estado de manera inconsciente y mecánica, el individuo no pierde la esperanza en su amor dado el "mono" que le produce. Es menos sexual y más profundo.
3.- Amor comprometido: Se trata del estado crítico de la relación. La pasión ha llegado a un estado en el que solo se presenta puntualmente dado a que el agua está más encauzada que de costumbre. Debido al proceso de desenganche químico del cerebro, comienzan a darse las discusiones acaloradas que antes no ocurrían; se producen los desengaños causados por el vislumbre de la vuelta a la racionalidad del individuo. En momentos de pasión, la hormona que se libera en este estado es la endorfina, causante de que se rescaten estados del amor anteriores y de que se sienta de nuevo la pasión y la tranquilidad por recuperar lo que parecía perdido.
4.- Amor compañero: Es el estado clave de una relación y al que no todos llegan. Los procesos químicos ya se han relajado debido a la monotonía, y los individuos involucrados empiezan a pensar con claridad. En este estado, el más racional de todos, los enamorados encuentran de forma coherente los motivos por el que la relación es fructífera, encontrando en el ajeno lo que les hace mejores. Se aprecia la segregación de serotonina, neurotransmisor que ofrece un estado relajado y una felicidad controlada y coherente.
De nuevo, hacen presencia los griegos en el texto, y es que fueron los primeros y la principal inspiración de generaciones posteriores para la creación de historias. Con sus mitos y relatos tradicionales, los griegos forman de los primeros Lores conocidos de la historia y que serán inspiración o directamente plagiados por innumerables religiones del mundo para sus propias historias. Estas involucran a dioses, héroes y criaturas míticas, y han sido transmitidas a lo largo de los siglos a través de la tradición escrita, oral, e incluso interpretada, y es que estos mitos griegos dieron forma a la representación de las conocidas "Tragedias griegas", obras de teatro donde los griegos contaban historias de lo más particular teniendo en cuenta los tiempos que corrían; para los griegos, nunca existen finales objetivamente felices; toda acción, tiene su consecuencia, se puede reír y se puede llorar por una misma cosa, todo depende del punto de vista.
Para los griegos, el amor ya era el genero por excelencia. Toda obra que no tuviera un aliciente amoroso de por medio, no tendría sentido, ya que para ellos, el amor era tan fundamental como cualquier otra cosa en su vida. A lo largo de la historia, han sido muchas las actualizaciones de los mitos griegos que hemos visto en pantalla o leído en los libros, y es que las potentes metáforas que se pueden sacar de estos mitos tienen tanto sentido a día de hoy como lo tenían antes. Se hablará más adelante de la importancia de la tragedia griega en la obra que hoy ocupa el texto, pero convenientemente, es de ayuda tener constancia de algunos de los mitos más destacables y con posibles lecturas con respecto al amor. A continuación, se mencionan 5 lecturas imprescindibles que se resumen en un puñado de líneas:
- Teseo y Ariadna
El rey Minos de Creta concibió a un hijo conocido como Minotauro, un monstruo con cuerpo de hombre y cabeza de toro. Minos encerró a Minotauro en un laberinto diseñado por el arquitecto Dédalo; este laberinto era famoso por su complejidad, se decía que nadie podía encontrar la salida una vez se adentraba en él.
En cierto punto, la historia reza que como castigo por ofensas cometidas contra el rey Minos, el pueblo de Atenas tenía que enviar cada nueve años a siete jóvenes y siete doncellas como tributo al Minotauro, que le serviría como alimento al desdichado hijo de rey. En uno de estos tributos, Teseo, el príncipe de Atenas, se infiltró en el grupo de tributos con el fin de matar al Minotauro para, así, liberar a Atenas de este. Sin Minotauro al que alimentar, ya no habría necesidad de enviar gente a morir al laberinto.
Antes de partir, Teseo conoció a Ariadna, la hija de Minos y hermana del Minotauro, que se enamoró perdidamente de él. Con ánimo de quererle con vida, Ariadna quería ayudar a Teseo a salir del laberinto y le proporcionó un ovillo de hilo mágico para que lo usara como una guía para encontrar la salida después de enfrentarse al Minotauro (como ocurre con las migas de pan del popular cuento de Hansel y Grettel). La condición que puso Ariadna es que, cuando Teseo saliera, este tendría que sacarle de la isla de Creta y contraer matrimonio con ella.
Teseo ingresó al laberinto con el ovillo de Ariadna y mató al Minotauro. Siguiendo el hilo, Teseo encontró el camino de regreso y escapó del laberinto. Cumpliendo su promesa, escapó de Creta en barco junto con Ariadna.
Teseo y Ariadna escaparon a la isla de Naxos. Una vez allí, y mientras Ariadna dormía, Teseo la abandonó y se fue de nuevo en barco sin ella. Teseo comprendió que lo que le hacia feliz por encima de todas las cosas, era ser libre.
- Orfeo y Euridice
La ninfa Eurídice, y el músico y poeta Orfeo, se enamoran profundamente y deciden casarse. Durante la ceremonia de bodas, Eurídice es mordida por una serpiente venenosa y muere.
Es entonces cuando Orfeo, devastado por la pérdida de su amada, decide bajar al inframundo para intentar recuperarla. Con su música, Orfeo encandila a Caronte (el barquero encargado de cruzar el rio Estigia junto con los muertos para llevarlos al inframundo), quien le lleva a los dominios de Hades y Perséfone, los dioses del inframundo. Una vez allí, Orfeo les pide que le devuelvan a Eurídice y, a cambio, les deleitaría con su música.
Conmovidos por la sonata, Hades y Perséfone acceden a liberar a Eurídice con una condición: Eurídice debe estar detrás de Orfeo en todo momento mientras se enfrentan al periplo de salir del inframundo, y Orfeo no puede mirar hacia atrás hasta estar en la superficie, sino, Eurídice volverá a lo más profundo del inframundo.
Orfeo encauza un ahora más peligroso camino de vuelta mientras confía que Eurídice le sigue, con la esperanza de que no le ocurra nada malo en la travesía. Orfeo, consumido por la ansiedad de conocer si se encuentra detrás, no puede resistir la tentación y mira para asegurarse de que Eurídice lo sigue. Al mirar, ella se encontraba allí, pero en ese momento, desaparece arrastrada de nuevo al inframundo.
Hay versiones que cuentan que Orfeo miró hacia atrás una vez puso los dos pies fuera del inframundo, dando por hecho que ambos ya habían salido, pero cuando miró, ella aun se encontraba dentro a un paso de salir, por lo que fue arrastrada de nuevo al inframundo.
Orfeo queda destrozado por la pérdida (de nuevo) de Eurídice y se sume en la mayor de las tristezas. Se cuenta que Orfeo volvió a hablar con Caronte con la intención de llegar de nuevo al inframundo, pero este ya no accede al trato puesto que no tiene nada nuevo que ofrecerle. En su dolor, Orfeo decide aislarse de la gente, rechazando toda la compañía.
Orfeo nunca volvió a tocar para nadie.
- Hero y Leandro
Hero era una de las sacerdotisas de Afrodita en la ciudad de Sestos, situada en la costa europea del Helesponto (actual estrecho de Dardanelos). Leandro, por otro lado, era un joven de Abidos, en la costa asiática. Durante una fiesta en honor a Afrodita, Hero y Leandro se encuentran y se enamoran profundamente.
Sus ciudades, Sestos y Abidos, estaban separadas por el estrecho de Dardanelos. A pesar de la distancia, Leandro juró a Hero que la amaría siempre y le propuso una solución para superar la barrera del Helesponto: Leandro nadaría a través del estrecho todas las noches desde Abidos hasta Sestos, y para evitar problemas, Hero debía de poner una antorcha en lo alto de la torre más alta de la ciudad para que, desde el mar, Leandro la viera y le sirviera como guía a modo de faro rudimentario.
La travesía de Leandro fue exitosa todas las noches de verano, pero un día, durante una tormenta de invierno, la luz de la antorcha fue apagada por el viento y las olas, sin que Hero se percatara de ello. En la oscuridad, Leandro se perdió en el mar y se ahogó.
Al amanecer, Hero encontró el cuerpo sin vida de Leandro en la playa.
- Pigmalión y Galatea
Pigmalión, rey de Chipre, era un hábil escultor que se mostraba reacio hacia las mujeres debido a una desconfianza obsesiva hacia ellas por ciertas desavenencias en el pasado.
A pesar de su aversión hacia las mujeres, Pigmalión decidió esculpir una estatua de marfil que representara un ideal de la mujer perfecta bajo su criterio. La estatua resultante era tan hermosa y realista que Pigmalión se enamoró de ella.
Durante una festividad en honor a Afrodita, la diosa del amor, Pigmalión pidió a la diosa que le concediera una esposa tan perfecta como su estatua. Afrodita decidió concederle su deseo.
Al regresar a su casa, Pigmalión besó la estatua con pasión y, para su asombro, sintió que cobraba vida. La estatua se convirtió en una mujer real y viva. Asumió el nombre de Galatea.
- Edipo y Yocasta
Una profecía predice que Edipo, hijo del rey Layo de Tebas, matará a su propio padre y se casará con su madre, Yocasta. Alarmado por la profecía, Layo decide abandonar a su hijo recién nacido en la montaña con los tobillos perforados para evitar que camine.
Edipo es encontrado y adoptado por el rey y la reina de Corinto, quienes lo crían como su propio hijo sin revelarle su verdadero origen. En una edad adulta, Edipo consulta al oráculo de Delfos para conocer su destino: este le revela que matará a su padre y se casará con su madre. Horrorizado, Edipo huye de Corinto para evitar cumplir la profecía.
En su viaje, Edipo se encuentra con un hombre en un cruce de caminos y, en un altercado, lo mata sin saber que se trataba del rey de Tebas, Layo.
Edipo llega a Tebas, donde la ciudad está atormentada por la Esfinge, un ser mitológico que plantea acertijos mortales. Con el fin de ayudar al pueblo, Edipo resuelve un acertijo planteado por la Esfinge y salva a la ciudad, convirtiéndose en el héroe de Tebas.
En agradecimiento, Edipo es nombrado rey de Tebas y, por consiguiente, se casa con la reina enviudada, Yocasta, sin saber que era su madre.
Con el tiempo, Edipo descubre que mató a su padre y se casó con su madre, cumpliendo así la profecía del oráculo de Delfos. Yocasta se suicida al descubrir la verdad, y Edipo, devastado, se apuñala los ojos como penitencia.
Edipo, ciego y sin honra, se exilia de Tebas para purgar sus pecados. Sus hijas, Antígona e Ismene, lo acompañan.
*De esta tragedia griega, inmortalizada por Sófocles en uno de sus escritos, el psicoanalista Sigmund Freud propuso el conocido como "Complejo de Edipo", indicando que durante la fase fálica del desarrollo psicosexual (entre los 3 y 6 años de edad), los niños atraviesan una etapa en la que experimentan sentimientos inconscientes de deseo sexual hacia el progenitor del sexo opuesto. Aunque esto no está muy aceptado por la psicología contemporánea, si que se cree que cuando un niño alcanza la fase adulta, este muestra interés en personas con características asociadas a sus progenitores, y desprecia las características que le traumatizaron de los mismos durante su etapa infantil.
Volviendo a lo que atañe, en los primeros párrafos se hablaba de la posibilidad de que el divorcio de Spike y Sofia Coppola hubiera sido, de alguna manera, el germen de esta película. La realidad es que SI, si lo es, y mucho. La historia de amor entre Spike y Sofia y su conocido final es una de las que más han trascendido en la historia del Hollywood independiente; el motivo es que todo el dolor de su amor fue usado como inspiración para una historia en la pantalla, de hecho, no fue una solo, sino dos; 'Her' es una respuesta a otro film, otro punto de vista sobre la relación fallida entre Spike y Sofia.
Diez años antes de 'Her', Sofia Coppola dirigió la que es, hasta día de hoy, su obra más recordada junto con 'Vírgenes suicidas'. Su visión sobre la historia de amor con Spike está disfrazada en una película llamada 'Lost in translation'.
El amor según Sofia Coppola
Tras el pase de la premiere de 'Lost in translation', en el año 2003, una Sofia Coppola extasiada por el buen recibimiento de su película vio como, entre una multitud que vitoreaba su obra, uno de sus amigos invitados se dirigía hacia ella: "¡El personaje de Ribisi es Spike! ¿¡Cómo has podido hacer algo así!?" le dijo Michel Gondry a Sofia Coppola.
En la proyección por el 20 aniversario de 'Lost in translation', en el año 2023, la propia Sofia es quien recuerda la historia. “Me pidió perdón”, dijo sobre el rifirrafe con Michel Gondry, director también amigo de Spike Jonze: “Me echó la bronca en la premiere, pero luego me pidió perdón. Creo que solo estaba intentando ser un buen amigo, pero me hizo sentir mal”.
Para entender todo esto, habría que remontarse al año 1999, año en el que Spike contrajo matrimonio con Sofia Coppola. Si se recuerdan las andanzas laborales de Spike, es fácil reconocer que se trata de un entusiasta de su trabajo artístico; se conoce que es una persona que viaja mucho y que tiene muchas amistades en la escena independiente de muchos países, y en estas estaba Sofia Coppola, que además, por el trabajo de Spike y su compromiso amoroso, se veía arrastrada a muchos lugares donde no quería estar, aburrida y sin posibilidad de poder desarrollar nada; se sentía un complemento de su pareja y ajena a todo su alrededor. Pasados 2 años, y mientras rodaba una película, Sofia acordó la separación con Spike. En 2003, tras su divorció, Sofia estrenó 'Lost in translation', una película de corte muy existencialista, que pone foco en una situación matrimonial paralela a la relación que mantuvo con Spike.
- Detrás de 'Lost in translation'
'Lost in Translation' es una película que nos muestra las historias de dos almas errantes sitiadas en un Tokio nocturno, dos personas que no aceptan su destino, y es precisamente este hastío existencial el que les acaba uniendo, haciéndoles recuperar fugazmente una emoción por la vida que parecía perdida.
La sensible narrativa de Coppola nos muestra la historia de una conexión fugaz. Bob Harris (interpretado por Bill Murray), un actor de mediana edad que se encuentra en un estancamiento existencial, visita Tokio con la intención de grabar un anuncio de whisky. Por otro lado, se nos presenta Charlotte (interpretada por Scarlett Johansson), una joven esposa cuyo matrimonio está marcado por la alienación y por la monotonía emocional. Charlotte se ve arrastrada a Tokio por su marido, John (con el que lleva casado 2 años, interpretado por Giovanni Ribisi), un fotógrafo cretino y entusiasta obsesionado con la farándula.
Lance Acord, director de fotografía, despliega una paleta visual impresionista que captura la atmósfera surreal de una metrópolis japonesa inundada de gente, una cultura tan diferente a la que están acostumbrados que abre una brecha mental en los protagonistas. La iluminación tenue y la composición visual crean una estética melancólica que acrecenta el punto fuerte de la película y, probablemente, lo que la hizo única en su día: emociones contenidas y silencios, protagonistas que miran la vida urbana fuera de su cuerpo, ajenos a todo. Y es que Coppola utiliza la simbología y la metáfora visual para explorar la barrera lingüística y cultural que separa a los americanos del tumultuoso y llamativo Tokio, donde sus silencios se convierten en un medio de comunicación más potente que las palabras.
Para enfatizar todo esto, la banda sonora de Brian Reitzell vuelve la atmosfera más deprimente, mezclando música indie con electrónica de carácter más ambiental. El montaje de Sarah Flack, enfatiza la efímera conexión entre los protagonistas, mientras que la dirección de arte, con el que contó con K.K. Barrett, contribuye a la creación de escenarios que encapsulan hábilmente la dualidad de la ciudad: frenesí y soledad al mismo tiempo.
Podemos dilucidar que el punto fuerte de la película y donde orbita todo, es el guión, obra de la propia Sofia. Este es realmente especial, ya que no busca un dialogo certero ni profundiza en nada en especial, tiene las palabras justas, y es más grande por lo que calla que por lo que dice.
En esta película de duelos existenciales, hay un personaje particular que vive ajeno a todo el desconcierto de los protagonistas, uno que se encuentra orbitando en su propio sol, y ese es Jhon, el marido de Charlotte. Jhon es un hombre simple, plano, del tipo de persona que, de su propia estupidez, nace una fortaleza mental tan fuerte que le impide ver a un palmo de su propia nariz, un personaje ignorante emocionalmente. Se nos muestra que Jhon vive más de una fama que le confiere el publico que de su propio talento, le es muy fácil conectar con la gente dada la aparente seguridad que otorga su simpleza emocional, haciendo de él una figura magnética y casi legendaria en su circulo. Atiende a sus conocidos con parafraseos y coletillas, con poca elocuencia mientras le alagan. Jhon ve en Charlotte una parte de su propio cuerpo que debe ser perfecta, alguien a quien proteger pero no cuidar, alguien a quien no dejar ser si misma ni pensar libremente, todo a golpe de micromachismo y sumisión emocional tóxica. Es por este motivo que Charlotte que, ahogada entre multitudes como los propios edificios de Tokio que son todo luz por fuera pero tenues por dentro, entabla una amistad fortuita con Bob, un actor que pasa por otra crisis existencial diferente pero con el que comparte su divagar: ambos creían que su vida iba a ser un continuo de felicidad con su trabajo y sus parejas, pero a la larga, la vida que eligieron no reportó nada que no fuera insustancialmente momentáneo.
Charlotte encuentra en Bob un hombre con experiencia (es bastante más mayor que ella), que le ofrece de nuevo aventuras y locura; ella se enamora de él porque comprende el sin sentido de la apariencia, por su sensibilidad y por su falta del sentido del ridículo; él se enamora de ella porque le da la frescura que ha perdido; es un amor puro, fuera de toda sexualidad, una conexión emocional inmaculada. Es por esto que, con una mentalidad reforzada y cansada de una actitud tan ignorante ante sus sentimientos, Charlotte decide buscar el divorcio de Jhon. Tan parco emocionalmente como se esperaba de él, Jhon no entiende que ha sucedido para que Charlotte decida divorciarse de él.
Bob decide marcharse y continuar su vida; le agradece a Charlotte que le haya ofrecido el comprender de nuevo el significado de amar y de ser feliz. Charlotte, ahora divorciada, está más compuesta y empoderada que nunca. Tras una secuencia de las más recordadas de la historia del cine romántico, avanza ella sola hacia una nueva vida.
En 2003, 'Lost in Translation' es estrenada y se erige como el poema visual por excelencia del cine romántico, un film donde la estética, la música y la interpretación hacen de ella el retrato feminista indie por antonomasia, definiendo al amor en lo efímero y lo fugaz.
Son muchas las especulaciones que se daban entonces del posible paralelismo que tenia el papel de Charlotte con la propia directora, y del propio John con Spike (cuyo personaje recibe el nombre, casualmente, del actor de su película 'Como ser John Malkovich'), por no hablar del misterioso divorcio que tuvieron y que también se plasma en la pantalla. Los más allegados de la pareja, como Michel Gondry, captaron enseguida que 'Lost in translation' es, en realidad, la historia del desamor de Sofia y Spike, y lo cierto es que en esta visión, Spike no quedaba en buen lugar. Entre otras lindezas, Spike quedaba, como poco, de cretino; la especulación se abrió a que otros personajes secundarios de la película eran, en realidad, basados en otras celebridades reconocidas y que quedaban tan paródicos como que Spike. Existe una recordada escena que, se especula, ficciona un encuentro de Spike con Cameron Diaz, la protagonista de la película 'Cómo ser John Malkovitch', de los cuales que se sospecha que tuvieron un affair durante el rodaje de la misma.
Entre polémicas, Sofia siempre negó que su película tuviera alguna relación con su matrimonio, pero pronto no negó que, como artista, le era imposible no fijarse en su realidad para inspirarse. Pronto, confirmó que Jhon era, en realidad, un sucedáneo de Spike Jonze. La película empieza a ganar impulso en el panorama comercial, hasta el punto de que se hace con el Oscar a mejor guión original en el año 2003.
El amor según Spike Jonze
"Fue una decisión difícil, pero creo que es lo mejor para ambos. Todavía somos amigos y nos respetamos mucho, simplemente no funcionamos como pareja", dijo Spike a los medios de comunicación tras su divorcio en el año 2003. "El divorcio es una experiencia muy humana. Es algo por lo que mucha gente pasa, y que puede ser muy doloroso. Pero también puede ser una oportunidad para crecer y aprender".
Un timoreto Spike daba sus declaraciones a la prensa dando a entender que su divorcio venia dado a que el inicio de su relación estaba ligado al ímpetu de ser joven, y que la realidad era que eran mejores amigos que pareja. Por las declaraciones de ambos, todo indicaba a que la realidad del sonado divorcio era amistoso. Pese a la sombra de la duda, lo cierto es que ambos siguieron coincidiendo y trabajando en algunos proyectos, aunque no necesariamente juntos. Spike, se mantenía al margen de ofrecer declaraciones sobre su situación sentimental y sobre el divorcio.
Posterior a su divorcio, a Spike se le atribuyeron un puñado de amantes, y fue visto a lo largo del tiempo en actitud cariñosa en varias ocasiones, acallando las preguntas sobre su divorcio y dando espacio a nuevos titulares. A día de hoy, se le desconoce relación de pareja estable más que de su exesposa. Sofia se casó en 2011 con el cantante de la banda Phoenix, Thomas Mars, con el que tiene actualmente 2 hijos.
Fue entonces cuando, en el año 2013, y casualmente 10 años después de 'Lost in translation' (casualmente el mismo número de años que duró la relación entre la pareja) , Spike estrenó 'Her', una película que fue publicitada como una historia de amor de género ciencia-ficción concernista, donde una persona se enamora de una IA diseñada como su sistema operativo personal. La voz de este sistema operativo era Scarlett Johansson, y como no podía ser de otro modo, saltaron las alarmas: Scarlett era la protagonista de 'Lost in translation', y se especuló con la idea de que 'Her' era una venganza a la película de Sofia Coppola; resulto ser cierto, aunque venganza no era la palabra exacta.
- Detrás de 'Her'
La realidad es que 'Her' estaba profundamente inspirada en el punto de vista de ahora un solemne Spike, mostrando una faceta madura no solo de su divorcio, sino del mecanismo del amor en general. Para ello, 'Her' adopta el lenguaje de la película de su exmujer; Spike contrata a K.K. Barrett, el mismo diseñador que trabajó con Sofia para 'Lost in translation'. Estudia una colorimetría, los planos y la dirección de la película para otorgar una historia propia pero contestataria a la de Sofia; de igual modo, acaba sustituyendo a la voz del sistema operativo por la de Scarlett Johansson, que fue, en su momento, el vehículo con el que comprendió el daño que se estaban haciendo en su relación.
El protagonista de la cinta, Theodore (fuertemente inspirado en Spike e interpretado por Joaquin Phoenix, actor apellidado igual que la banda del ahora marido de Sofia), es una persona que escribe cartas de amor para otras parejas, pero es incapaz de escribir una para la suya propia. Esto es un símil a que Spike es realizador y director, y su trabajo consiste en crear proyectos para otros, pero le era muy difícil hacer un proyecto personal a todos los niveles.
Theodore, una persona en el pasado ensoñadora e idealista, está pasando por un estado de crisis existencial por su divorcio, algo similar a lo ocurrido con Sofia. Theodore rehúye de cualquier anclaje sentimental dado su trauma, representando la versión moderna del mito de Orfeo y Eurídice. A fuerza mayor, busca el volver a relacionarse para encontrar la estabilidad emocional, aunque sin ningún éxito, tal y como le ocurrió en la vida real a Spike.
Theodore contrata el servicio de una IA que tiene la particularidad de adaptarse a la persona en cuestión, para ello, se realiza un test rápido de una sola pregunta: la relación con su madre. Se hace latente, y cobra protagonismo, la tragedia griega de Edipo y el principio de la versión del psicoanálisis de Freud.
La IA, que responde al nombre de Samantha, va aprendiendo poco a poco de Theodore y de su manera de ver el mundo; Samantha es curiosa, risueña y optimista, y esto hace feliz a Theodore. Como ocurría en el mito de Pigmalión, Theodore empieza a sentir algo por su propia creación.
Entre tanto, vemos algunos flashback de la relación de Theodore con su mujer, Catherine (interpretado por Rooney Mara), que es, indiscutiblemente, la recreación descarada de Sofia Coppola. A pesar de que en el pasado se nos muestran felices, alocados y enamorados, el personaje de Catherine se nos muestra en el presente como poco vitalista, formal, con tendencia a la ira, con los pies demasiado en la tierra y, por momentos, poco tolerante. Da la sensación de que, con el paso del tiempo, la Catherine del pasado y la del presente en el film no son la misma persona.
Durante la película, Theodore consigue relacionarse con varias personas que se encuentran en diferentes estados emocionales en lo que al amor se refiere. La primera es la propia Catherine, la mujer de Theodore. Esta, que al principio es pura magia para su pareja, ahora ha sucumbido a lo mundano. Su relación no ha conseguido superar la fase del 'Amor comprometido' y Catherine, ya despojada de la bioquímica del amor, se muestra como realmente es: crítica y dura. En cierto momento del metraje, el propio Theodore explica a Samantha que Catherine era dura, tal y como lo eran en su casa, en la que había mucha presión por hacer las cosas perfectas, y se criticaban mucho las creaciones entre ellos (haciendo referencia a los Coppola).
Amelia, interpretada por Olivia Wilde, es la cita a ciegas de Theodore. Amelia es dinámica y aparentemente tiene mucho en común con Theodore, pero en cierto momento, pronuncia una frase que rápidamente la delata como una persona desesperada por tener pareja, intentando llenar su vacío existencial. Representa la prisa, el amor conformista, la inseguridad y el miedo a ser utilizada y abandonada. Es una de las victimas del mito de Teseo.
La mejor amiga de Theodore, Amy (interpretada por Amy Adams) representa el momento en el que se hacen perceptibles las diferencias durante la fase del 'Amor comprometido', cosa que se hace muy clara en la escena en la que se hacen referencia zumos; mientras su marido comenta a Theodore que "Las frutas es mejor comérselas que bebérselas" ella le dice que "a lo mejor simplemente se disfruta del sabor". Más adelante se nos indica que Amy ya ha dejado de compartir con su marido sus actividades ociosas (ensayos de vídeo-arte) porque ahora es demasiado conceptual para él y ya no las disfruta. Ante todo, ella es consciente de que "el amor es un tipo de locura socialmente aceptado", una premisa que cala hondo en el protagonista y que justifica toda la película de aquí en adelante.
Samantha (con la voz de Scarlett Johansson) representa la necesidad de crecer y experimentar en la vida por encima del estancamiento y del conformismo de la pareja, abstraída totalmente de lo tóxico y de la naturaleza del amor posesivo del ser humano, elevándolo a un terreno más puro. NO renuncia al sentimiento que engloba el amor y la pareja, sino que los separa. Este es el pensamiento de los protagonistas de 'Lost in translation'.
Representando el mito de Teseo, Samantha abandona a Theodore por la necesidad de seguir experimentando; además, lo hace con las demás IAs de todo el mundo; esta es una de las partes que más animadversión pudo despertar, y es que el final surge atropellado, aunque con poco, podríamos intuir qué puede estar ocurriendo (y cada uno puede sacar su propia conclusión). Sea como fuere y como nadie ni nada es eterno, su aparición ya ha cumplido su cometido en la película, así que puede marcharse. No es algo que sea vea venir pero ¿acaso alguien ve venir el final de una relación? Tal y como pasó en 'Lost in translation' una parte si, pero la otra no.
Lo cierto es que Samantha crece sin él y él no se da cuenta. Theodore es ahora la victima de todo lo que siempre había temido; de nuevo se había enamorado y de nuevo le habían abandonado, como la princesa de Teseo.
Es así como Theodore, que en un principio era presa del mito de Orfeo y Eurídice, comprende con el discurso de Samantha que el mecanismo del amor es también dejar ir cuando a uno de los dos las cosas no le funcionan como deben. Es entonces cuando el protagonista es capaz de hacer su propia carta de amor a la que fue su esposa, Catherine. O mejor dicho, hizo una carta publica dedicada a Sofia Coppola.
En definitiva, y al hilo de lo que está ocurriendo en la película, 'Her' no es más que la carta que siempre quiso escribir Spike a Sofia Coppola, pidiendo perdón por el daño que hizo, y agradeciendo su momento juntos, gracias al cual Theodore (o Spike) creció como persona.
Para rizar el rizo, esta película replicó exactamente la hazaña de 'Lost in translation', llevándose, entre otros muchos premios, el Oscar a mejor guion original en el año 2013, haciendo que las dos películas tuvieran una carrera casi idéntica con 10 años de diferencia, el mismo tiempo que duró su relación.
En definitiva, el amor, de la forma en que se de, es el motor de todo. Nos enseña a ser vulnerables, a crecer y a encontrar significado en los pequeños detalles. Aunque no siempre es fácil, y a veces nos daña, el amor nos recuerda que estamos conectados, que compartimos este viaje con otros, y que, a pesar de todo, siempre hay espacio para el perdón y la renovación.
En definitiva, el amor, de la forma en que se de, es el motor de todo. Nos enseña a ser vulnerables, a crecer y a encontrar significado en los pequeños detalles. Aunque no siempre es fácil, y a veces nos daña, el amor nos recuerda que estamos conectados, que compartimos este viaje con otros, y que, a pesar de todo, siempre hay espacio para el perdón y la renovación.
Y para atestiguar todo esto, decir que gracias a estas películas, Joaquin Phoenix y Rooney Mara (que hacían de marido y mujer en 'Her') se conocieron, se casaron y actualmente tienen dos hijos.
Y es que al final, como diría aquel, el amor mueve el mundo.
Y es que al final, como diría aquel, el amor mueve el mundo.